Gran estupor y cierto pesar os traemos la triste noticia de que el sello Irrational Games, responsables de la saga Bioshock ha cerrado sus puertas.
No sabemos si se trata de algún problema financiero (aunque el desarrollo de Bioshock Inifinite fue caro y complicado), aunque podemos decir que Ken Levine y otros miembros del estudio han decidido reunirse en un equipo más pequeño con la idea de seguir creando juegos muy centrados en su narrativa.
En cuanto al resto de trajadores, tenemos entendido que recibirán apoyo de la empresa (antes de cerrar) y de otros estudios de Take-Two para que puedan encontrar nuevas oportunidades.
Una lástima que vaya a desaparecer uno de los estudios más interesantes de esta generación de consolas y esperamos que todos sus trabajadores tengan suerte labrándose un futuro. Estaremos antentos a todos ellos y al propio Levine.
Vía Gematsu
Vía Kotaku