Siendo poco objetivo con esto de los videojuegos, puedo decir que las aventuras gráficas son de los mejores géneros que existen dentro de la industria. En serio, pocas veces he tenido tan buenos (y malos) momentos que jugando a grandes obras como Monkey Island, Hollywood Monsters o Runnaways.

Por lineas generales estos juegos son divertidos, tienen historias geniales y aspectos visuales muy interesantes. Por supuesto no todo es perfecto, y es cierto que normalmente pecan de repetir su fórmula y de ser en algunos momentos, injustamente difíciles, al no tener que demostrar nuestra habilidad al mando, si no caer en la cuenta de que combinación de objetos decidieron sus programadores que sería más útil en un puzzle. Esto hizo que un género tan potente, como lo era en los años 90, poco a poco fuera perdiendo fuelle.

Aún así de vez en cuando nos sorprenden ciertas obras por su genialidad, o por su precioso aspecto visual o por lo divertido de su historia. En mi caso Machinarium, fue uno de esos juegos. Un juego tipo flash, que salía hará dos años, y que contaba la historia de un robot que había sido abandonado en un vertedero y que tiene que regresar a la ciudad de donde vino, para buscar a su compañera.

Con un aspecto visual increible, que parecía dibujado a mano por completo, el juego nos proponía una pequeña aventura (ciertamente no era muy largo), con unos complicados puzzles y una forma distinta de entender la mítica jugabilidad del point & click. Su música era muy adecuada a su estilo y era muy interesante de ver como, sin ningún tipo de diálogo, entendías a la perfección todo lo que sucedía a tu alrededor, que tenías que hacer y que sentía su protagonista.

Hoy estamos de enhorabuena, pues Machinarium está ya disponible para todos los usuarios del iPad 2. Creedme cuando os digo, que ya sea en su nueva versión para la tablet, o en su antigua versión en PC, este es un juego que deberías probar.